No nos veremos en este día. Tú
probablemente ni siquiera necesites decírmelo. Yo me levantaré temprano como de
costumbre y me iré al trabajo. Tú, seguirás durmiendo, yo ordenaré mi cabeza,
mis momentos contigo, tus besos, tus abrazos,
tus " te quiero". Probablemente, será un día cualquiera, no tan
diferente al de la semana pasada o el mes pasado. Quizás si escuchas la radio,
recordarás que día será. Yo, estaré toda la mañana atareada. Papeles e informes
inundando mi mesa. Pero no dejaré ni un momento de pensar en ti, como ahora lo
estoy haciendo. Seguramente, hoy no nos veamos, ni mañana. Te sentiré, te veré
en algún instante perdido del día o de la noche, te susurrare que te quiero,
con miedo, como es costumbre en mí. Tú para demostrarme que sigo siendo
correspondida, me responderás. Yo quedaré feliz, alimentando a estas malditas
mariposas que habitan en mi cabeza o ¿es en mi corazón? No, no, es en el
estomago, aunque ahora me apetecería que jugasen por mi sexo. Seguramente nuestras miradas no se crucen hoy, ni mañana
ni nuestros dedos se acaricien, pero todo lo que siento por ti, sigue a tu
lado, esperando ese momento ese instante en el que todo se para, y nada existe,
porque todo lo eres tú, y es lo que ahora merezco tener…
By Anaïs